La imaginación mutilada

La respuesta está cuando apagas la luz… ¿Qué encuentras entre tanta oscuridad? La seguridad de una mente adulta que ha despojado a la penumbra de su magia o por el contrario un mundo que nace en a partir de la imaginación… que tiene su raíz en los miedos mejor guardados, entre los fantasmas y los monstruos que ya llevan un nombre.
Algunos han decidido no salir de la oscuridad, ha decidido permanecer ahí entre sus miedos y sus monstruos, para transgredir la evolución natural de la imaginación atrofiada de cualquier adulto que ha olvidado temer de su propia imaginación.
Generalmente, uno…como cualquiera, decide un día terminar en una masacre con la imaginación que te asusta, te perturba o te frustra… aquel suceso que te sorprende imaginando monstruos o batallas un día se acaba entre las matemáticas y la biología. Y la verdad es que solemos no darnos cuenta del momento exacto en el que sucede.
La imaginación furtiva de los hombres podría convertirse en una pesadilla fuera de control que haría enloquecer a cualquiera, excepto a aquel osado niño que de manera determinante decidiera vivir atrapado entre los acontecimientos de una imaginación desatada que se convirtiera en una adicción placentera para decidir jamás irse de aquel lugar que todos los niños abandonaron.
Habría que pensar un poco hacia atrás… hemos sido educados para dejar de creer, que los monstruos no existen, que los fantasmas tampoco, mucho menos los duendes, las brujas y tampoco los amigos imaginarios.
Las pesadillas sólo son pesadillas y no más. No existe nada que no pueda ser explicado por la ciencia o por un adulto. El día que entendimos todo eso… lo perdimos absolutamente todo. Y en un ambiente seguro comenzamos a vivir atrapados en realidades en tercera dimensión sin fantasía, ni magia. Y así fuimos felices.
Hasta que un día viene un hombre a contarnos una historia en la cual habla con los monstruos y entonces nos planteamos ¿qué hicimos con nuestra imaginación? ¿qué le hizo la ecuación a nuestra imaginación? La llevo a un lugar seguro con paredes forradas de almohadón y la vistió con una camisa de fuerza hasta que aburrida de luchar con la realidad se dejó morir.
La imaginación ha dejado un hoyo negro en nuestra mente, donde parece no haber habido nada… y donde nadie recuerda que había ahí.
Podría no suceder nada…podría jamás haber mirado hacía adentro para darme cuenta cuando dejé de pensar que la imaginación aún hace posible muchas cosas… una de ellas me sería recordada un día por Borges: toda situación que pueda ser imaginada por la mente del hombre puede ser real, porque acostumbrados a censurar la imaginación nos hemos negado esa posibilidad de realidad. Y sí repentinamente imaginamos un momento en el cual la imaginación ha vestido la realidad de nuevas posibilidades, habremos así vivido tantas vidas como habremos querido.
Aún me parece increíble haber mutilado la imaginación para dejarla incapacitada, cuando una persona que ha decidido quedarse en la sombra ha podido enfrentar cualquier cosa sin temer nunca de nuevo.